
Florentin Lanceleur
Entrevista con un ganador de WorldSkills
Nos hemos reunido con Florentin Lanceleur, ebanista de 23 años y entusiasta de su profesión desde la más tierna infancia. Desde hace un año y medio es formador en Compagnons du Devoir, en Dijon. Ha viajado a Gales y a La Réunion para proseguir su formación y conocer diferentes facetas del oficio, así como varios procedimientos y culturas. En esta entrevista compartirá su experiencia tras su participación en la competición WorldSkills, en la que ganó una Medalla a la Excelencia.
¿Qué te fascina más sobre tu oficio?
Lo que más me fascina es convertir una idea en una realidad. Tras un par de horas, y a veces también de un par de días, conviertes en realidad la idea que tenías en mente, y ese es el aspecto que más me llena. Además, se crea algo que permanecerá durante mucho tiempo. Eso es lo que me impulsa en mi día a día.

¿A qué edad te decidiste por este oficio?
No sé si realmente hubo un factor desencadenante o una edad determinada en la que dijera «quiero hacer esto», pero cuando tenía 10 u 11 años les pedí a mis padres un atornillador a batería por Navidad y ahí empezaron a darse cuenta de lo que querría hacer más adelante. Desde que trabajo como formador, he estado en contacto con diferentes oficios (techador, albañil, cantero) y me he preguntado lo siguiente: ¿por qué la madera? Porque es muy atractiva. Disponer de diferentes tipos de maderas y modelos proporciona mucha libertad y te hace plantear cuáles serán los mejores y los más bonitos. Lo que me hizo soñar y sigue haciendo soñar a mucha gente es la imagen del artesano que se pone a hace virutas de madera con un cepillo. Cuando estoy un poco nervioso o aburrido, agarro una pequeña pieza de madera, un cepillo y hago virutas. Me ayuda a relajarme.
¿Cuál es tu relación con las herramientas alternativas?
Siempre he sido un amante de las herramientas. Aparte de mi pasión por mi oficio, también me encantaban las herramientas y me siguen entusiasmando, ya sean manuales o eléctricas.
Siempre me ha gustado buscar herramientas para trabajar la madera en mercadillos y rastros, para recuperarlas. Esa es mi auténtica pasión hoy en día y nunca tengo suficiente. Intento seguir avanzando siempre y descubrir nuevos procedimientos. Para mí la herramienta es muy importante. Se dice mucho que el formón es una prolongación de la mano y es algo que cobra sentido cuando uno está en el banco de trabajo, tiene su pieza de madera y sus herramientas y debe hacer algo con esos recursos, así como transformar el material. Si no se dispone de las herramientas adecuadas o se carece de la preparación necesaria, la tarea se complica. Por este motivo, invierto mucho tiempo en cuidar de mis herramientas e intento tener siempre las mejores y en el mejor estado posible.
¿Prefieres trabajar con herramientas manuales o eléctricas?
Actualmente es un placer poder disponer de nuevas máquinas y tecnologías, de los accesorios que se fabrican con estas y que nos facilitan la vida, además de hacerla mucho más cómoda, como las máquinas a batería o los aspiradores con conexión Bluetooth®, sin olvidar lo que se hacía en el pasado. Es la combinación de ambas lo que actualmente nos permite desarrollarnos y poder hacer frente mediante la tecnología a todo lo que la realidad de la empresa nos exige.

¿Qué es lo que te gusta más de las herramientas de Festool?
Lo interesante de Festool es la tranquilidad que proporciona. Al comprar una máquina, uno sabe que durará mucho tiempo, que es precisa. Y si surgen problemas, hay piezas de recambio. Luego también está la versatilidad de las máquinas inalámbricas, que son muy cómodas de manejar. Está la tecnología Bluetooth®, que se conecta al aspirador. Festool es muy innovadora y eso es lo que me motiva a equiparme con Festool y a comprar estas herramientas. Sé que nunca darán problemas y que siempre serán lo mejor de lo mejor.

¿Por qué participaste en las competiciones de WorldSkills?
Para mí, la idea de inscribirme en la competición WorldSkills era principalmente una excusa para trabajar y tener un objetivo. Mi idea era: «Hay que darse el capricho. Si sale bien, mejor, y si no sale bien, tampoco pasa nada».
De este modo, al principio no sentí presión y al final todo fue felicidad. Participé en las eliminatorias regionales y salió bien, eso fue la bomba. Después tomé parte en los campeonatos franceses, siempre con la misma idea: «si sale bien, mejor. Y si no sale bien, no pasa nada, porque habré evolucionado, aprendido y conocido a otras personas». Y fue precisamente eso lo que me llevó a conocer a antiguos competidores, a los que hoy en día conozco bien y que incluso se han convertido en mis amigos. Me ayudó realmente a entablar nuevas relaciones que van más allá de lo profesional y a aprender mucho más.

Tuve la suerte de viajar a los campeonatos franceses, empezar cuando éramos unos 12 o 13 participantes e intercambiar conocimientos con ellos, lo que fue muy enriquecedor.
No contaba con la posibilidad de lograr el título de campeón francés. Pensé que se me había cumplido un sueño, ya que para mí era inalcanzable. Estoy agradecido por haber formado parte del equipo francés, por haber podido entrenarme durante varias semanas, prepararme física y mentalmente y centrarme en la consecución de un objetivo, que es representar a nuestro país.
Siento realmente que tuve suerte y que fui un privilegiado por haber podido disfrutar de esta experiencia en WorldSkills. Para mí es un verdadero orgullo y lo recordaré durante mucho tiempo. Es algo que le deseo a cualquier persona.

Lo que más me fascina del oficio de carpintero es convertir una idea en una realidad. Tras un par de horas, y a veces también de un par de días, conviertes en realidad la idea que tenías en mente, y ese es el aspecto que más me llena.
Florentin Lanceleur, carpintero y ganador de la Medalla a la Excelencia de WorldSkills

¿Qué has aprendido de esta experiencia?
Si tuviera que resumir la participación en esta competición y, en particular, en esta etapa internacional de los campeonatos mundiales, en definitiva es una búsqueda de la excelencia, no de la perfección, ya que es inalcanzable, si bien el deseo es obtener siempre los mejores resultados y de la forma más rápida. Es una sensación curiosa, ya que se requiere tiempo y a veces uno no lo logra. Surgen muchas dudas y es como competir en un maratón contra uno mismo, te repites que lo lograrás, que hay que continuar e intentar dejar esos pensamientos para otro momento. Me gustó vivir esa sensación, pero no lo habría resistido durante muchos meses, ya que al final uno se desmoraliza con ese afán de querer ser siempre mejor porque es muy difícil de alcanzar. Es algo que puedo aplicar a mi profesión diaria actualmente, porque tenía ciertas exigencias y una vez que las tienes, es evidente. Esta competición es una de las pocas posibilidades de potenciar nuestras capacidades.

Esta búsqueda de la excelencia es tan difícil de disfrutar que uno se ve obligado a prepararse y contar con apoyo.
Se requiere mucho trabajo interior, eso es cierto. Porque cuando se trabaja en algo durante muchas horas y aun así no funciona, te dan ganas de dejarlo. Hay que arremangarse, pensar en el objetivo, continuar y recordar que somos capaces, porque otros ya lo han hecho antes, así que nosotros también lo conseguiremos.
Y luego también está el apoyo de la familia, los amigos y las personas con las que nos relacionamos y que nos animan. Representamos a nuestro país, por lo que no podemos permitirnos ningún error, y eso es lo que nos impulsa cada vez.
También es un aventura profesional, pero principalmente personal, porque nunca habría logrado llegar hasta el final si no hubiera tenido el apoyo de personas que me decían que lo podía lograr y que estaban orgullosas de mí.
¿Recomendarías la marca Festool a tus conocidos?
Festool es una marca que recomiendo. Para alguien que esté empezando o que quiera trabajar en unas condiciones excelentes, Festool es la elección perfecta.
Festool representa la durabilidad, la calidad del trabajo y, principalmente, la idea de que las máquinas no deben dar problemas. Y cuando surgen, se solucionan fácilmente gracias a las piezas de recambio y a la garantía. Es una excelente inversión, pase lo que pase.
¿Cuáles son tus planes de futuro?
Estoy convencido de que para progresar hay que fijarse objetivos en la vida. En mi caso antes era la competición. Ahora mismo es transmitir conocimientos. Más adelante, es posible que quiera fundar una empresa. Lo más importante es encontrar un objetivo, darlo todo, motivarse, tener siempre una sonrisa y vivir con pasión. Y, por último, el trabajo siempre da sus frutos, por lo tanto, no hay ningún motivo para no hacerlo.

* La marca denominativa Bluetooth y los logotipos son marcas registradas de Bluetooth SIG, Inc. Por lo tanto, todo uso que TTS Tooltechnic Systems AG & Co. KG y, por consiguiente, también Festool, hagan de dicha marca está sujeto a un contrato de licencia.